martes, 9 de septiembre de 2008

LOS AHORROS DEL PUEBLO

Las encuestas preguntan sobre la mejor opción de los ahorros del pueblo. Algunos piensan que lo mejor es ahorrar en fondos mutuos, otros creen que mejor es comprar dólares y euros. Me parece irónico preguntar a los ciudadanos del pueblo respecto al destino de sus ahorros, cuando es de público conocimiento que la población en general en alto porcentaje se encuentra en estado de pobreza y pobreza extrema. Siendo así, es obvio que el pueblo no tiene capacidad de ahorro, pues, no puede satisfacer la canasta básica familiar. Esta cruda realidad es indiscutible toda vez que en el Perú el trabajo es un privilegio y los salarios están estancados hace mucho tiempo, más por el contrario han perdido capacidad de compra debido a la inflación que vive el país. Esta regla tiene excepciones como es el caso de los congresistas, caso ANAYA por ejemplo, quien según informe mediático ha colocado a sus tres hijos en puestos del Estado (Ministerio de Vivienda, y Energía y Minas), lo propio podría ocurrir con otros funcionarios de gobiernos regionales y Municipalidades, quienes gozan de ventajas como jugosos sueldos más pago de incentivos, cafae, aetas, o cualquier otra forma camuflada que no tiene el pueblo. Si bien la macro economía crece al 9 % o más, ello no significa que dicho crecimiento favorezca al pueblo, salvo en ínfimas proporciones por efectos de salarios, etc. que solo le permiten sobrevivir. Así por ejemplo, las enormes utilidades que perciben las empresas mineras, la telefónica, el gas, las financieras, etc. van a engrosar las arcas de los accionistas. Los ciudadanos del pueblo que por suerte o privilegio tienen empleo perciben un promedio de S/. 800.00 a 1,000.00 al mes, mientras que los pensionistas y jubilados reciben menos, los demás deben partir al exterior. Entonces con esta realidad de ingresos no podría existir posibilidad de ahorro. Lo que ocurre en gran medida es una economía ficticia de bonanza por la aparente liquidez que permiten los plásticos - Tarjetas de Crédito - pero los usuarios en general no comprenden que esta aparente bonanza terminará por cobrarse la revancha más tarde que temprano. Tal ves existan incautos que consideren viable los préstamos de las financieras para ahorrar y/o pagar deudas, cuando el crédito cuesta más del 50 %, eso sería factible debido a la escaza y débil formación que ofrecen nuestros centros educativos de primaria y secundaria, incluso las universidades y sus filiales que a modo de fábricas algunas titulan a los clientes, perdón digo los estudiantes, sin ofrecerles una sólida formación profesional.