lunes, 15 de junio de 2009

PACIENTES EN RIESGO: REUTILIZAN MATERIAL DESCARTABLE

“Material que debe ser descartable es usado más de una vez por médicos del Hospital Rebagliati” (*)

Comentario:

El Comercio del día 15-06-2009 denuncia hechos insólitos y patéticos. En este caso como ciudadano y profesional con alguna experiencia realmente no entiendo nada y me declaro ignorante por lo siguiente:

De conformidad con versiones oficiales somos un país en crecimiento promisorio, pero;

1.- Las autoridades del gobierno anuncian reiteradamente que el PBI crece. La economía es sólida y nos comparan con China. Además, por la inmensa cantidad de recursos naturales que tenemos somos ricos.

2.- Se dice que la pobreza ha bajado según estadísticas del INEI. Así mismo el uso de celulares ha crecido, hoy tenemos 22 millones de usuarios, y los grandes Mall Chilenos saturan el mercado con increibles ofertas, al alcance de todos los bolsillos, etc. etc.

3.- También dicen hasta el cansancio que la única alternativa es la inversión privada por que genera empleo, y quien se opone a ello es comunista, terrorista, anti sistema, antipatriota, chavista, etc. Estos adjetivos se han usado contra nuestros compatriotas de la selva que protestan en defensa de sus tierras frente a la exclusión social evidente y amenazas de privatización.

Pero; si somos ricos y crecemos para admiración del mundo: ¿Cómo explicar una situación de falencia como la que denuncia El Comercio en materia de salud pública?

Frente a estos hechos preguntamos al gobierno:

¿Si el Perú crece y la economía es sólida, porqué los hospitales carecen de medicinas y material quirúrgico?

¿Si baja la pobreza porqué ha recrudecido la TBC que hace años fue erradicada?

¿Porqué mueren peruanos de frío en los andes, y muchas veces de hambre?

¿Porqué se incrementa la inseguridad ciudadana y crece la delincuencia en forma alarmante?

¿Porqué no se renuevan e implementan los establecimientos de salud, y porqué no bajan las medicinas?

Además, el gobierno a extendido la atención de salud a otros sectores de la población, y por ende crece la demanda; pero no crece la oferta. Por esta razón la deficiente calidad de los servicios empeora como se refleja en los reclamos y quejas que son de público conocimiento en los conocidos rotafonos de Radio Programas del Perú - RPP que cumplen una elogiosa funcion social al servicio de la sociedad.

¿Entonces de que crecimiento hablamos.....? El Comercio dice una verdad lacerante.

Por último, existen antecedentes por contaminación y/o contagios ocurridos a pacientes en los hospitales, sin que el estado repare estos graves daños. Estamos frente a un problema serio que debe ser resuelto con buen criterio, sabiduría, y ponderación sin soberbia, no vaya a ocurrir otra solución precipitada y nefasta como el baguazo. Por eso felicitamos a las enfermeras por su oposición a prácticas temerarias, pues, lejos de resolver los problemas por evidentes falencias económicas, podrían agravarse en desmedro de la vida y la salud de los pacientes.

(*) Fuente: El Comercio, Lunes 15 de junio de 2009

Material que debe ser descartable es usado más de una vez por médicos del Hospital Rebagliati

7:19 | Pacientes en riesgo. Pese a esterilizar los productos, los restos de sangre quedan. Enfermeras han advertido de esta riesgosa práctica a las jefaturas.

Por: Alfredo Alí Alava

Unidad de Investigación

En el hospital Edgardo Rebagliati, uno de los nosocomios más importantes del país, ocurre un hecho gravísimo que pone en peligro la salud y la vida de miles de pacientes. Según documentos oficiales y testimonios obtenidos por El Comercio, desde julio del año pasado los médicos reutilizan en operaciones quirúrgicas oftalmológicas y laparoscópicas instrumental descartable que —como su nombre lo indica— solo debe usarse una sola vez y luego ser desechado.

Lo peor es que —según documentos gráficos— en algunos casos, pese a que son esterilizados, en estos dispositivos biomédicos quedan adheridos residuos de sangre y, probablemente, tejidos de pacientes atendidos anteriormente.

Por si esto fuera poco, los pacientes no son informados ni sospechan que están siendo operados con instrumental descartable empleado en otras intervenciones. Más aun —según las instrucciones escritas dadas por los altos funcionarios del Rebagliati— en caso de que ocurriese alguna complicación (infección, enfermedad o muerte del paciente) debido a la reutilización de ese material, “los responsables serán los usuarios”, es decir, los médicos, según funcionarios del hospital.

HABLAN LOS DOCUMENTOS

Esta práctica empezó a conocerse a través de un rumor a mediados del 2008, pero se formalizó el 9 de julio de ese año. Ese día, el doctor Fernando Vargas Aguirre, gerente quirúrgico de ese hospital, mediante el memorándum 097, informó al doctor Ramiro Carbajal Nicho, presidente del Comité de Material Médico de Reúso, sobre los cinco primeros instrumentos descartables que se podían reutilizar en el Servicio de Oftalmología.

Según ese y otros documentos remitidos por Vargas Aguirre a Carbajal Nicho, existía ya un acuerdo con los jefes de Oftalmología y Cirugía General para reutilizar instrumental descartable.

Para que no quedaran dudas de la decisión, en dos de los documentos Carbajal hizo hincapié en que la reutilización del material descartable debería hacerse “aun cuando sus fabricantes lo recomienden para un solo uso”.

En total, se ordenó reutilizar 27 tipos de instrumentos de Oftalmología y Cirugía General, de los cuales 15 son descartables (ver listado). Respecto a estos, los fabricantes recomiendan que sean desechados después de un primer uso, pues su reutilización, a pesar de que pudiesen ser sometidos a un proceso de esterilización, podrían originar problemas infecciosos.

Esto sucedería porque —según especialistas consultados por este Diario— en las partes más estrechas y escondidas (lúmenes) de dicho instrumental podrían quedar adheridos e imperceptibles al ojo humano tejidos, residuos de sangre, gérmenes, bacterias u otros elementos patológicos que podrían afectar la salud del nuevo paciente intervenido con ese mismo equipo. Así, los pacientes podrían contraer hepatitis, VIH (sida), tuberculosis y otras enfermedades.

EL GRITO EN EL CIELO

Pero quienes se han opuesto férreamente a esta práctica, aunque sin éxito por ahora, son las enfermeras. El Comercio tiene en su poder una serie de documentos en los cuales ellas advierten a las diversas instancias y jefaturas respecto de los peligros que acarrea reutilizar el material descartable.

En lo sustancial señalan que varios de esos instrumentos tienen lúmenes (partes no desmontables y con orificios o conductos muy estrechos) que no permiten una limpieza o desinfección total con los procesos de lavado y esterilización a los que pudiesen ser sometidos.

Un equipo de enfermeras desmontó una pinza descartable que había sido utilizada en una operación laparoscópica y que luego fue esterilizada en el Centro de Esterilizaciones del Rebagliati. La realidad confirmó lo que se sospechaba: el instrumental tenía restos de sangre del paciente que había sido operado anteriormente. Y, seguramente, también restos de tejidos.

Este hallazgo fue fotografiado, y el caso (para que no se dudase de su autenticidad y fuese tomado en cuenta por los directivos del hospital) lo expuso en su real crudeza la enfermera licenciada Carmen Chávez Cabrera el 28 de noviembre del 2008 ante una comisión encargada de manejar el concurso para jefaturas del Servicio de Enfermería, integrada por la doctora Elisa Hassan y Marcos Saucedo, gerente de Recursos Humanos, entre otros.

Chávez expresó que la esterilización del material descartable no garantizaba su total desinfección y demandó mayor respeto por los pacientes. Mostró diapositivas en las que se ve una pinza laparoscópica Endoclinch con restos de sangre en sus partes internas. Otras diapositivas mostraban agujas, en este caso reusables (Verres y Cushing), que, pese a que habían sido esterilizadas, también contenían restos de sangre.

“El reúso de material desechable es peligroso”

“El asunto no admite discusiones: si el fabricante recomienda desechar un dispositivo biomédico después de un primer uso, debe ser desechado. Lo contrario sería actuar de manera negligente y significaría poner en grave riesgo la salud de los pacientes”.

Así lo dijo a El Comercio un médico que tiene a su cargo la calidad de los dispositivos quirúrgicos que vende una empresa de reconocido prestigio.

Dicho profesional, que por razones obvias prefirió el anonimato, comentó que los dispositivos descartables no cuentan con protocolos oficiales (procedimientos que proporcionan los fabricantes) para su esterilización. Tampoco existen procedimientos orientados a validar su desinfección.

El especialista comentó que, adicionalmente a ese problema, si esos instrumentos son sometidos a procedimientos de esterilización no establecidos de manera oficial, se corre el riesgo de alterar su funcionamiento y afectar su estructura original, su calidad y su vida útil.

En el caso de los cables o cánulas de uso laparoscópico, estos tienen ductos tan estrechos que difícilmente pueden ser desinfectados totalmente. Explicó que los dispositivos descartables traen adheridos en sus envases un símbolo que recomienda no usarlos por segunda vez. Se trata de un “2” rodeado por un círculo y atravesado por una línea diagonal.

SEPA MÁS

Esto es lo que se está reutilizando

Según documentos oficiales, se están reutilizando los siguientes instrumentos:

grapadora endoscópica lineal cortante de 30-40 mm, grapadora lineal cortante de 80 mm, grapadora lineal cortante de 60 mm, trocar de 5 mm, trocar de 10 mm, pinza de punta de titanium para faco de 30°, cuchillete 3,2 mm, cuchillete 15 mm, cablería para faco, vitrector, conexión para facoemulsificación, cuchillete crescent, cauterio para cirugía ocular, vía de infusión para vitrectomía, cánula de aspiración subretinal, set de facofragmentación, lanceta corneoescleral, punta para aplicación endoláser curva, punta para aplicación endoláser recta y punta de vitrectomía posterior.