Ahora se habla de renegociar el contrato de gas según informa el importante Diario Gestión - El diario de economía y negocios del Perú - de hoy día 10 de Julio de 2010. Me parece acertada y sensata la medida, a la vez que justa y equitativa; pero lo importante radica en que esta noticia viene del mismo gobierno, pues, cuando esa aspiración era el grito de otros peruanos patriotas o nacionalistas se les tildó de anti sistema, chavistas, y hasta subversivos. El diario en mención trae el siguiente titular: “El MEM convoca a consorcio para renegociar contrato de gas”
“12:21La cita entre los representantes del Poder Ejecutivo y del consorcio Camisea se realizaría hoy a las 17:00 horas, detalló el Ministerio de Energía y Minas.
El Gobierno convocó a una reunión con el consorcio Camisea, liderado por la argentina Pluspetrol , para dialogar sobre la renegociación de un contrato de licencia de gas, informó el ministro de Energía y Minas, Pedro Sánchez………………………”
Fuente: http://gestion.pe/noticia/508058/mem-convoca-consorcio-renegociar-contrato-gas
Parece ser que los negociadores en diversos contratos de concesión como gas, petróleo, minería, agroindustria, biodiversidad, etc. No valoran los recursos naturales - no renovables - en su real medida e importancia como palanca de desarrollo y de producción con valor agregado. Hay todavía quienes defienden la exportación de materias primas a precios vil, incluso sin satisfacer el mercado interno en el caso del Gas Natural y otros.
Los recursos naturales deben servir además, para generar nuevos puestos de trabajo para la población económicamente activa (PEA) que crece cada día por efecto de la demografía. Debemos tener presente que en Perú existen cien (100) universidades, y cada una de ellas tiene filiales o sucursales en otras regiones distintas a su sede principal por lo que la población estudiantil crece, y obviamente los potenciales profesionales muchas veces ven el futuro incierto y sin esperanza, pues, frente a la falta de oportunidades en el país al término de la carrera la inmensa mayoría debe buscar una fuente de trabajo en el exterior, en defecto, debería estar preparado para incrementar el sub empleo como ambulante o taxista, etc. Esta realidad clara y meridiana no lo quiere ver el gobierno, y me hace recordar a mi abuelita que decía: “No hay peor ciego que aquel que no quiere ver”
Solo un reducido porcentaje de profesionales tiene acceso al mercado laboral. Pero no se olvide usted estimado lector que cien universidades, más cientos de filiales o sucursales producen miles de profesionales cada año, y muchos ostentan títulos hasta para empapelar la catedral. Pese a ello, no debemos olvidar la deficiente calidad de formación técnica y profesional que ofrecen la mayoría de universidades en razón de una deficiente infraestructura física, falta de implementación con equipos y tecnología de punta, y fundamentalmente por ausencia de profesores idóneos. Es decir, algunos promotores y empresarios han visto en la universidad una actividad de alta rentabilidad económica, vale decir el mejor negocio, más aún si “gozan de inafectación de todo impuesto directo o indirecto que afecte los bienes y servicios propios de su finalidad educativa y cultural” consagrado en el artículo 19º de la Constitución Política del Estado, cuya ventaja no lo tienen ninguna otra actividad empresarial manufacturera que cada día está más lejos del mercado y la competencia por la libre importación que genera el TLC.
Consecuentemente y como corolario de lo expuesto, precisamos que pese a las enormes riquezas naturales que tenemos, no se resuelve el problema real de la pobreza, la salud, la educación, el desempleo, y crece de modo incontenible la delincuencia y la inseguridad ciudadana, frente a la indiferencia de las autoridades. Las municipalidades en muchos casos han creado "el serenazgo" con el objeto de dar trabajo a sus partidarios; pero no hacen nada por erradicar las amenazas de la ola delictiva, sólo buscan más ingresos para la burocracia y por eso han creado el arbitrio o tasa de seguridad ciudadana que no existe realmente, con el agravante que incluso los mismos trabajadores ediles no pagan dicha tasa en muchos casos porque abusando del poder político y autoridad que representan, son los primeros en exonerarse de la obligación, otra vez, "La Ley del embudo"........Frente a esta situación, resulta coherente RENEGOCIAR los contratos del Gas de Camisea, y debería hacerse extensivo a todas las demás, especialmente las concesiones mineras de ORO calculando la tributación sobre los precios de venta en el mercado internacional entre otras cosas. De nada sirve perseguir a los ambulantes, micro empresarios, taxistas, etc., bajo el pretexto de ampliar la base tributaria. Deben pagar más, los que ganan más.
