martes, 20 de octubre de 2009

LAS PERLAS DEL CONGRESO

Tratar sobre el congreso resulta ocioso. Estamos frente a un caso sin precedentes. Nunca en la historia hemos asistido a un espectáculo tan lamentable y nefasto como ahora. Este congreso es de PESIMA CALIDAD y confronta una serie de escándalos degradantes que desmerece el respeto de los ciudadanos en razón de sus propios actos o inconductas que lindan algunas veces con el delito. Los hechos bochornosos más saltantes y vergonzosos según informan los medios de comunicación social entre otros se refieren a los siguientes: 1) contratos de personal fantasma 2) contratos de personal no idóneo para consultorías y asesorías 3) acosadores que abusan de la necesidad de las personas 4) come pollos que adulteran documentos 5) sentenciados por robar luz 6) presuntos evasores tributarios 7) congresistas que humillan a sus empleadas haciéndose lavar los pies 8) congresistas que abusan de sus empleados haciéndoles planchar sus camisas 9) etc. etc. Es de conocimiento público que cada congresista en forma directa selecciona y designa a su personal asesor, auxiliar, y de servicios. La administración del congreso se limita a darle formalidad conforme a los procedimientos administrativos; pero no los selecciona, ni los asigna a cada congresista. Para revertir esta delicada situación de imagen negativa, los congresistas - mal llamados padres de la patria - han decidido viajar a provincias supuestamente con gastos pagados, dizque, para impulsar y supervisar las obras. No obstante, debemos observar que si la labor fundamental de legislar lo hacen mal o en forma deficiente, cómo podrían entonces cumplir otra función técnica que la mayoría no conoce. Creemos que se trataría más bien de impulsar el proselitismo político con miras a presuntas reelecciones, pues, estamos próximos a las elecciones generales, regionales y municipales. Entonces debemos preguntar: Si el Perú tiene abundantes leyes que incluso colisionan entre sí en muchos casos, por cuya razón se trabaja para dar de baja a miles de normas. Entonces: ¿Para qué necesitamos aprobar más leyes intrascendentes que por último no se cumplen, y no cambiarán la situación del país? ¿No ven acaso que tan pronto se promulga la ley, de inmediato se corrigen con Fe de erratas, proyectos modificatorios y otros? ¿Por qué mejor no exportamos leyes que es lo que más abunda, y no sirven para nada?......... Quizá sea mejor que los congresistas hagan turismo, antes que aprobar leyes………….. Frente a la realidad del actual congreso, habría que prever con responsabilidad la imposición de requisitos mínimos para acceder al congreso y/o cualquier otro, desterrando también la figura de la reelección para todos sin excepción, de tal forma que ninguna persona tenga la posibilidad de enquistarse en cargos públicos. Pues, hemos observado a través de la historia que en algunos casos han existido representantes vitalicios, y recientemente existió un congresista que bajo el ardid de luchar por los viejitos, él mismo se volvió viejito con todas las ventajas del cargo; mientras miles de viejitos siguen muriendo en la lucha buscando la justicia social que nunca llega.