martes, 1 de septiembre de 2009

HAGAMOS EMPRESA CON LA LEY MYPE

La PYME en 72 horas:

El Ministerio de la Producción está impulsando la creación de micro y pequeñas empresas (MYPE) en 72 horas mediante la simplificación de trámites. Esta medida es positiva y debería ampliarse a otros asuntos como estrategia eficaz contra la corrupción, máxime, cuando la burocracia tradicional se resiste al cambio por temor presuntamente a perder la mamadera. En efecto, cualquier persona puede acceder a la información en la siguiente dirección, y les deseamos éxito: Ingreso Directo al Servicio: http://190.81.122.150:8282/tramite/

Al respecto destacamos que el plazo de 72 horas para constituir la micro o pequeña empresa (MYPE) significa trueque radical del inútil papeleo con el objeto eliminar costos onerosos y agilizar plazos que por muchos años simbolizaron la traba egoísta más torpe contra el empleo y la producción. Por esta actitud negativa muchas veces se abandonaron proyectos importantes agudizando el conflicto social y truncando justas aspiraciones del pueblo. En otros casos los trámites costaron más que el capital declarado para la MYPE debido a observaciones impertinentes que imponen algunas notarías y la SUNARP. Esta realidad contrasta con las facilidades que conceden los paraísos fiscales del mundo y como referencia citamos los siguientes: http://es.wikipedia.org/wiki/Para%C3%ADso_fiscal

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico –OCDE- señala como Paraísos Fiscales los siguientes: Andorra, Anquila, Antigua y Barbuda, Antillas Neerlandesas, Aruba, Bahamas, Bhréin, Bermudas, Dominica, Gibraltar, Granada, Islas Caimán, Islas Cook Islas Marshall, Islas Turcas y Caicos, Islas Vírgenes Británicas, Liberia, Liechtenstein, Mónaco, Montserrat, Nauru, Nive, Panamá, Samoa, San Cristóbal y Nieves, San Marino, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Vanuatu.

Sería loable que el proyecto de la MYPE se consolidara por parte de la administración gubernamental modificando las normas dentro del marco referencial siguiente:

· Debería implantarse el mono tributo para la MYPE, incluyendo estabilidad jurídica y tributaria en la misma forma que se aplica a empresas mineras, petroleras, gas, y otras. Todos somos iguales ante la ley. Nadie debe ser discriminado. Así lo consagra la constitución política. Esta práctica permitirá incrementar la base tributaria en razón directa a la formalización masiva.

· En la MYPE debería impulsarse de oficio algunos trámites precisados en la ley con el objeto de eliminar trabas de la burocracia, así como eliminar costos innecesarios.

· Las MYPE deberían tener pleno derecho a participar en todo tipo de actos y contratos con el estado para fines de abastecimiento de bienes y servicios sin el requisito de experiencia previa. Es obvio que una empresa recién constituida no podría acreditar este requisito, resultando así excluida del proceso en forma arbitraria y discriminatoria.

· Se debe supervisar la ejecución del programa MYPE para garantizar el éxito del mismo, y en caso de detectarse irregularidades o trabas de la burocracia, se procederá a corregir y castigar a los infractores aplicando sanciones oportunas y eficaces.

· La MYPE genera autoempleo masivo y alivia la pobreza del pueblo. En muchos casos son promovidas por ex servidores pensionistas y jubilados de reconocida experiencia técnica y profesional cuyas virtudes no deberían desperdiciarse.

· La MYPE constituye palanca del desarrollo. Pues, hoy día importamos todo: desde agujas hasta “patas de cabra”, calcetines, camisas, y la más simple cerámica, etc. Esta política neo liberal de libre mercado es nefasta para el pueblo, no solo porqué genera desempleo desterrando el trabajo productivo, sino que hace perder autoestima al convertir a la persona en ser minusválido con la única alternativa de emigrar al primer mundo. Hoy se estima que existen tres millones de peruanos en el exterior.

· Con la MYPE debemos dar valor agregado a los recursos naturales como el Oro, cobre, zinc, plata; biodiversidad, agroindustria, y artesanía que hoy regalamos a precios miserables. ¿Para qué sirven entonces más de cien universidades que tiene el Perú con cientos de filiales? Aquí abundan doctores, ingenieros, etc. ¿Acaso solo estamos preparados para hacer taxi y prestar servicios en el primer mundo?.........