sábado, 28 de febrero de 2009

DINERO PLASTICO

El dinero plástico que nos impone la economía neo liberal es evidentemente usurero. Si bien facilita la resolución de problemas inmediatos de los pobres, también los somete a una bola de nieve que terminará explotándoles en la cara más tarde que temprano. Bajo este sistema, el pobre paga más intereses que el rico; pero éste no se da cuenta y/o no le interesa debido a la acción mediática, la crisis, y la ignorancia. En efecto, la economía neo liberal muestra una bonanza ficticia que no es real. Crecen los inversionistas de empresas mineras, petroleras, teléfonos, financieras, centros comerciales, constructoras, etc. pero los pobres no. Dice que crecemos al 9 por ciento, y confunde a las personas humildes al disponer de mayor liquidez mediante una, dos, o más tarjetas de crédito por las que los acreedores no exigen mayores requisitos, salvo una firma, DNI, y copias de un recibo de agua, luz, o teléfono, etc. Así mismo, el mejor cliente será aquel que solicite y utilice el plazo máximo de 30, 60, y más meses, pues sin percatarse pronto terminará siendo esclavo y dependiente indesligable de la financiera. En estos casos incluso podrá disponer de dinero cash o en efectivo, así como pagar medias cuotas e incluso refinanciar la deuda; sin embargo, el costo del crédito podría incrementarse al 250 ciento o más según muestra la realidad concordante con la opinión de los expertos en temas financieros y negocios.
De otro lado, el CONSUMISMO es dañino para la sociedad y el desarrollo de los pueblos, y si bien es cierto que hasta el más pobre y humilde tiene acceso al uso de un celular, nextel, mp3, mp4, plasma, laptop, motocicleta, automóvil, ropa importada, salas de juego, viajes, pornografía, y alimentos chatarra, etc. Estos bienes y servicios no son indispensables y no resuelven los problemas de fondo como es la falta de trabajo, educación, salud, y vivienda; sino por el contrario la abundante oferta de bienes importados agravará el estado de pobreza del pueblo y frenará la producción, toda vez que no podemos ser competitivos con los productos importados. Entonces, careciendo de recursos económicos y financieros para pagar los bienes y servicios superfluos terminaremos por esclavizarnos de modo irreversible. En suma el modelo económico es más atroz que el antiguo latifundio representado por las desaparecidas haciendas; pero esta vez no podremos salir por imperio de la tecnología que es de dominio exclusivo del capitalismo.